De muflones

Hace unos días por casualidad descubrí una finca con ciervos y muflones, en esa ocasión iba en compañía de mi mujer, que aunque me deja hacer más de lo que merezco hay una cosa que no le mola y es que continuamente estoy con el coche por caminos, buenos y malos -casi siempre malos- y cuando está ella no para de repetirlo y no me deja concentrarme, así que ese día vi más bien poco y de fotos casi nada, pero hoy nos hemos ido mi hermano y yo con el todoterreno y  hemos campeado a nuestras anchas, concentrandonos en los muflones aunque los venados de esta finca eran magníficos. Y dando vueltas y revueltas al final este amiguete consintió en posar enseñándonos  las "posaderas", y yo al menos, me vine para casa tan contento, a pesar de que sólo nos miró en la sombra y no al sol como hubiéramos deseado.